CELEBRAN EN TODA CUBA UN PRIMERO DE MAYO COMBATIVO Y ALEGRE

Este Primero de Mayo, el pueblo cubano salió temprano a las calles de todo el país para festejar el Día Internacional de los Trabajadores, denunciar la excarcelación en EEUU del terrorismo Luís Posada Carriles y exigir la libertad para nuestros cinco compatriotas presos en cárceles norteamericanas.

Como parte de este pueblo, los trabajadores del ICAP nos sumamos a la multitudinaria celebración y marchamos unidos por la histórica Plaza de la Revolución. Para ello preparamos carteles, enarbolamos nuestro estandarte y nos concentramos detrás de una gran tela en la que podía leerse GLOBALICEMOS LA SOLIDARIDAD. Algo similar hicieron nuestros compañeros en el resto de las provincias del país.

Bajo la consigna de “Globalicemos la solidaridad”, los trabajadores del ICAP desfilaron por la Plaza de la Revolución

Un momento de gran emoción lo constituyó el saludo a los integrantes del segundo contingente de la brigada mundial de Solidaridad con Cuba “Primero de Mayo”,quienes disfrutaron del desfile desde la tribuna presidencial ubicada al pie del monumento a nuestro Héroe Nacional José Martí.

Ellos, con sus banderas nacionales y su diversidad de idiomas, corearon consignas de respaldo a la Revolución, al Partido, a Fidel y a Raúl. Junto a nuestro pueblo exigieron la libertad de Gerardo, Ramón, Fernando, René y Antonio y condenaron la decisión de las autoridades yanquis de poner en libertad al terrorista Posada Carriles. El trayecto hacia la Plaza fue largo pero lo aprovechamos para intercambiar con los integrantes de esta gran familia que labora en el ICAP. Luego, al regreso a nuestros hogares, el día siguió siendo especial pues como el resto de los cubanos y todo el mundo, conocimos el más reciente mensaje del Comandante en Jefe Fidel Castro, esta vez alertando al mundo acerca de la necesidad de detener la maniobra imperialista de trocar alimentos por combustibles sin medir las consecuencias que tamaña barbaridad puedan acarrear al mundo y especialmente a sus hijas e hijos más pobres.

Los que desfilamos por la Plaza sentimos PRESENTE como nunca antes al compañero Fidel y luego, cuando escuchamos el texto de sus reflexiones, lo volvimos a encontrar en su puesto de combate actual, el de la denuncia de todo aquello que intente impedir que un mundo mejor sea posible.